uff

-Hola sí, qué me puedo tomar para que no se me pegue el estómago?
-cómo?
-sísí, para que no se me pegue el estómago...me tragué 2 chicles seguidos.
-Pero, nada..o sea, no te pasa nada..
-Nono, no entendés, tuve que caminar como 45 cuadras para conseguir cambio para el colectivo, finalmente encuentro un quiosco pero tengo que esperar como quienticientos minutos a que el nene decida si la coca o la fanta mientras la madre le pasea las dos por la cara, encantada de que el pendejo comience a tomar serias decisiones en la vida. Una vez que el pibe se decidió por los sugus,logro comprar un paquete de chicles, y un flynn paff, es que son taaan ricos, o no?. Además necesitaba unas curitas para la parte de atrás del pie, o sea, por encima del talón pero antes de que empiece la pierna, cómo se llamará esa parte? no te lo dijeron nunca eso, como cuando tampoco te dicen que pueden haber más de 5 ramales de una misma línea y que lo único que los diferencia son una mínima letra en el cartelito, o lo difícil que es bancarse las colas para lo que sea pero desp uno tiene la peor puntualidad del mundo, o lo feas que son la mayoría de las tortas de cumpleaños y vos ya la aceptaste y tenés que idear un plan estratégico para encajársela al chico de ahí que parece el blanco perfecto, inclusive por qué la bolsa de Tokio bajó dos puntos. En fin, a veces los zapatos te hacen doler, viste? el punto es que ni llegué a comprarlas que vi el colectivo que se me iba entonces ahí mientras intentaba decirle $1,50 al chofer, podés creer que me sale $1,50 toodos los días! $1,50 de ida y claro, $1,50 de vuelta!, y bueno, entre todo me tragué uno de los chicles sin querer, y mientras buscaba un asiento iba pensando el horror que era eso, como cuando te decían de chiquito que si te tragabas las semillas de uva, te crecía un racimo dentro!. En eso justo se desocupa un lugar, pero esa señora tenía pinta de venir como hace muchísimas horas sentada, onda está en horario de jubilados así que está en todo su derecho, porque viste que ya a partir de las 11 am es el horario donde todos los viejitos salen creyendo dominar las calles y los asientos de colectivo como por 3 horas cuando seguro están paseando sólo para ver hasta dónde llegan hoy, y tengo un problema, onda un problema irreparable, odio sentarme en un asiento muy caliente, y encima calentado por otra persona, no puedo, no puedo, no se si es asco o qué pero realmente no lo disfruto, así que mejor decidí ir de pie. El segundo problema ahora es que me moría por seguir con el libro que empecé hace unos días y la verdad que siempre termino leyendo en los viajes porque en otros momentos se me hace imposible, igual, es todo un tema eso porque también amo mirar por la ventanilla, como un montón de gente más que disfrutan la inmensa alegría de ir mirando esas minipelículas en tiempo real que suceden del otro lado del vidrio. Y adentro del colectivo también claro, hay cada historia! Ahí justo se me ocurrió una excelente idea. Pensé que si generaba nueva saliva iba a encapsular el chicle, y qué mejor manera de generar nueva saliva que comiendo un nuevo chicle y aguantándolo un rato hasta que genere suficiente cantidad. El tema es que....bueno, para ese entonces me di cuenta que me había pasado una parada y entre el apurón por bajar y entre tanta saliva que había logrado.....bueno...me tragué ese denuevo y vamos, dale, ves? dos chicles seguidos, eso no puede ser bueno.
-Claro, me imagino.